México busca incorporar las autodefensas a la institucionalidad

En un contexto de violencia generada por las acciones de bandas de narcotraficantes, el Gobierno mexicano firmó, el pasado 27 de enero, un acuerdo para institucionalizar a los grupos de autodefensa de Michoacán.

El documento, de ocho puntos, contempla que estos grupos se incorporarán, de manera temporal, a los Cuerpos de Defensa Rurales, previa presentación de una lista con  los nombres de los integrantes, según un comunicado de la Secretaría de Gobernación.

Además, el personal de las autodefensas podrá formar parte de la policía municipal, siempre y cuando acredite los requisitos de ley y cuente con el aval del cabildo de su ayuntamiento.

Por otra parte, estas agrupaciones deberán registrar las armas que actualmente poseen o portan, ante la Secretaría de la Defensa Nacional. El Gobierno, por su parte, asume el compromiso de suministrarles dotación para su comunicación, traslado y operación.

Los recursos públicos utilizados con ese fin serán objeto de una auditoría por parte de los municipios.

Nuevos órganos federales

Antes del acuerdo, el Ejecutivo había creado mediante decreto la Comisión para la Seguridad y el Desarrollo Integral en el Estado de Michoacán, un órgano administrativo desconcentrado de la Secretaría de Gobernación.

Dentro de sus funciones, está coordinar a todas las autoridades federales para el restablecimiento del orden y la seguridad en dicho Estado, obligación que fue reafirmada en el acuerdo firmado con las autodefensas.

Además, el presiente Enrique Peña Nieto firmó el decreto por el cual se creó la Coordinación Nacional Antisecuestro, igualmente adscrita a la Secretaría de Gobernación, que tiene por objeto regular los esfuerzos de vinculación, operación, gestión, evaluación y seguimiento de las acciones entre las dependencias responsables de la seguridad pública del Gobierno Federal, los gobiernos estatales y el Gobierno del Distrito Federal.

Referencia internacional

Cabe recordar que el 4 de diciembre de 1989, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Convención Internacional contra el reclutamiento, la utilización, la financiación y el entrenamiento de mercenarios, que hasta la fecha no ha sido suscrita por México.

Además, en agosto de 1995, el relator especial sobre la cuestión de la utilización de mercenarios señaló, en su informe a la Asamblea, que los mercenarios suelen negar su condición alegando razones altruistas, étnicas, ideológicas o religiosas para disfrazar el carácter que tiene su participación.