De acuerdo con lo previsto en el artículo 3 de la Ley 43 de 1990, sobre la inscripción del contador público, la tarjeta profesional emitida por la Junta Central de Contadores es la que acredita que una persona está facultada para desempeñar dicho cargo y, por esta razón, se considera un documento público, indicó el Consejo Técnico de la Contaduría Pública. De otra parte, teniendo en cuenta lo previsto en el artículo 48, señaló que el contador no puede ser contratado en la entidad que haya auditado o controlado en calidad de funcionario o revisor fiscal, por el término de un año contado a partir de la fecha de su retiro del cargo.