Teniendo en cuenta que los empleados de las notarías son particulares y los notarios, sus empleadores, estos deben pagarles los salarios, afiliarlos al sistema de seguridad social y cumplir con las demás obligaciones previstas en el Código Sustantivo del Trabajo, advirtió la Superintendencia de Notariado y Registro. Aunque el cambio de notario no implica la terminación automática de los contratos de trabajo, en virtud de la configuración de la sustitución patronal, el nuevo notario puede hacerlo sin que exista justa causa para ello, siempre y cuando cumpla con el pago de las prestaciones e indemnizaciones establecidas en la ley y no se trate de personas que gozan de estabilidad laboral reforzada, como las mujeres embarazadas. En todo caso, el notario saliente debe estar al día con sus obligaciones laborales al momento de la posesión del nuevo notario.