La Corte Constitucional recordó que el principio de favorabilidad es una herramienta consagrada por el Constituyente para dirimir los conflictos laborales que puedan surgir de la aplicación tanto de fuentes formales de Derecho como de la interpretación que de estas se pueda desprender. Cuando concurren interpretaciones y, a partir de ello, se genera una duda razonable y seria respecto de la aplicación de una u otra interpretación, el operador jurídico (incluido el juez) siempre debe optar por la opción que más favorezca al trabajador/pensionado, so pena de infringir un mandato superior. Según el alto tribunal, esta garantía se instituye, entonces, como un límite a la autonomía judicial al momento de interpretar las normas laborales (M. P. Gloria Stella Ortiz).