El derecho deportivo en el escenario global: Champions League, Mundial Sub-20 Femenino y Eliminatorias al Mundial 2026 Ley del Deporte

Juan Pablo Caballero Rodríguez
Abogado y magíster en Derecho y Gestión Deportiva del Instituto Superior de Derecho y Economía (ISDE, España)

Es fundamental tener en cuenta que el mundo del deporte trasciende la mera actividad física, emergiendo como un fenómeno social y cultural con influencia y trascendencia global. Este año, nos hemos visto inundados de eventos deportivos: la Copa América, la Eurocopa, los Juegos Olímpicos, el inicio de la Liga de Campeones de Europa (Champions League), el Mundial Sub-20 Femenino y la continuación de las eliminatorias al Mundial de Fútbol del 2026. El derecho deportivo ocupa un lugar central en la gestión y regulación de estos grandes eventos internacionales.

Debido a esta cantidad de eventos y a que el derecho deportivo ha empezado a tomar más auge en este lado del Atlántico, es crucial hablar de ciertos temas de interés general. Uno de esos aspectos es la gestión de los derechos de transmisión. Los contratos televisivos para eventos como la Champions League y el Mundial Sub-20 Femenino tienen un valor que sobrepasa los miles de millones de dólares, en los cuales se involucra no solo a redes o canales de televisión tradicionales, sino también las plataformas de streaming.

Por eso, las entidades reguladoras de las ligas y federaciones se enfrentan al desafío de equilibrar el acceso global de transmisión de dichos eventos con la exclusividad que exigen los lucrativos contratos. Esto plantea preguntas sobre cómo debe realizarse un acceso justo a los eventos deportivos, especialmente en regiones en las que la cobertura es limitada o prohibitivamente costosa, como seguramente ocurre en Colombia, en donde el 100 % de los partidos de nuestra liga profesional de fútbol son transmitidos por un canal premium que cobra una suscripción mensual.

Respecto al Mundial Sub-20 Femenino que se realiza en Colombia, es importante destacar que servirá como una vitrina para el talento joven, así como para destacar y seguramente visibilizar en parte las desigualdades persistentes en el deporte en lo referente a las competiciones masculinas y femeninas. Es importante resaltar que la legislación deportiva internacional está comenzando a abordar estas disparidades, con regulaciones destinadas a garantizar condiciones laborales justas, salarios equitativos y el desarrollo del fútbol femenino desde la base, para que cumplan con las mismas garantías que tienen los jugadores masculinos. Por esa razón, este torneo puede convertirse en un precedente para la aplicación de regulaciones más estrictas que promuevan la equidad en el deporte.

‘Fair play financiero’

Por otro lado, hay un tema del que se habla todos los años cuando se presentan transferencias en el fútbol europeo: el famoso fair play financiero (FFP, por su sigla en inglés), que es un sistema implementado por la UEFA para asegurar que los clubes europeos no gasten más de lo que generan, con el fin de promover una competencia más justa. Sin embargo, la aplicación del FFP ha sido controvertida, ya que algunos clubes han encontrado formas de eludir estas regulaciones. Por eso, en ligas como la española, equipos como el Real Madrid tienen una nómina que cuesta alrededor de 1.360 millones de euros, mientras la nómina del Real Valladolid es de 46,40 millones de euros, algo que resulta bastante inequitativo y que afecta la competencia. Por eso, esta es una buena oportunidad para que se empiecen a mirar nuevas reglamentaciones que permitan un fútbol mucho más equitativo y una mayor competencia desde el punto de vista deportivo.

Sin embargo, esto no es algo que solo suceda en Europa. Recientemente, lo comenzamos ver en Sudamérica, donde los clubes brasileños tienen nominas que superan por muchos millones de dólares a las otras ligas del fútbol sudamericano, lo que ha terminado repercutiendo en que los torneos organizados por la Conmebol se conviertan en una liguilla final entre clubes de la liga brasileña, con lo cual se pierde un poco de interés por parte de los aficionados de otros países que ven que sus equipos no tienen forma de competir contra esas nóminas millonarias.

Aquí veo una oportunidad inmensa de los abogados especialistas en la materia de promover regulaciones que permitan una mayor equidad en los equipos y que volvamos a tener un fútbol mucho más atractivo en todos los países de la región.

Otro tema de vital importancia en el que se involucra el derecho deportivo es el de las transferencias de jugadores. El inicio de la Champions League trae consigo un aumento en las mismas, así como disputas contractuales.

Los contratos deportivos son documentos complejos, donde se involucran no solo términos financieros, sino también cláusulas de rescisión, derechos de imagen y acuerdos de patrocinio. Aquí los abogados deportivos jugamos un papel clave en la negociación de los mismos, para asegurar el cumplimiento de las normativas vigentes y proteger los intereses de nuestros clientes.

Dopajes

Un asunto que no puedo dejar pasar por alto, de los más sonados y complejos dentro del mundo del deporte, es el manejo de los casos de dopaje, que hoy están en el ojo del huracán, debido al tratamiento desigual del caso del tenista italiano Jannik Sinner, quien dio positivo en controles de dopaje, pero que fue absuelto de la investigación y de la sanción automática, bajo la supuesta razón de que la sustancia ingresó a su cuerpo por un masaje que le fue dado por su fisioterapeuta, que tenía una herida en una de sus manos y que se había aplicado el medicamento que se encontraba en el organismo del tenista.

Este caso ha sido muy criticado, ya que en el mundo del deporte y en el mundo de los abogados expertos en la materia se ha considerado como un trato preferencial y discriminatorio, en comparación con otros atletas que enfrentan o han enfrentado situaciones similares. Recordemos que hemos tenido varios deportistas colombianos que han sido suspendidos de forma automática por la presencia de boldenona en sus cuerpos, a pesar de que se ha probado en enumeradas ocasiones que la misma proviene de la carne de res que se consume en el país.

Estas críticas han puesto de manifiesto que existen graves inconsistencias en la aplicación de sanciones antidopaje, donde algunos atletas enfrentan sanciones severas, mientras que otros parecen beneficiarse de ciertos privilegios. Así, existe la necesidad de una mayor transparencia y equidad en la gestión de las políticas antidopaje, lo cual es esencial para mantener la integridad del deporte.

Recomendaciones para el ámbito local

Centrándonos en lo que atañe a Colombia, como una nación emergente en el ámbito deportivo, tenemos la oportunidad de aprender de estos desafíos globales, con el ánimo de fortalecer el marco regulatorio en el deporte. Algunas recomendaciones que considero claves son las siguientes:

- Mejorar las regulaciones antidopaje. Se debe buscar una implementación de políticas antidopaje más estrictas y transparentes, asegurando que todos los atletas sean tratados de manera equitativa.

- Fortalecer el FFP local. Aunque el FFP es una regulación que solo aplica en el ámbito europeo, creo que Colombia y especialmente Sudamérica debería pensar en adaptarlo a sus propias ligas para evitar que los clubes incurran en gastos insostenibles y que se promueva una competencia más equilibrada.

- Promover la igualdad de género en el deporte. Aprovechando el desarrollo del Mundial Sub-20 Femenino, las autoridades colombianas tienen la oportunidad de desarrollar y aplicar normativas que aseguren salarios justos y condiciones laborales equitativas para las mujeres en el deporte, incentivando el desarrollo del fútbol femenino desde las bases.

- Modernizar los derechos de transmisión. Asegurar que los contratos de transmisión de eventos deportivos en Colombia sean justos y accesibles para la población en general, para evitar la concentración en pocas manos y promover el acceso a los mismos través de plataformas digitales, como ocurre en los torneos Conmebol, donde ciertos partidos son transmitidos de forma gratuita por la red social Facebook.

Estas recomendaciones no solo mejorarían la infraestructura legal del deporte en Colombia, sino que también posicionarían al país como un líder regional en la regulación deportiva.

Por último, pero no menos importante, los avances de la tecnología y de la globalización del deporte hacen que el derecho deportivo enfrente nuevos desafíos, como, por ejemplo, la regulación de la inteligencia artificial en el análisis deportivo, la protección de los datos personales de los atletas y la lucha contra la corrupción y el dopaje. Estas son áreas que requerirán una atención creciente en los próximos años, así como todo lo referente al control de las apuestas deportivas, temas que no solo impactarán en los eventos actuales, sino también definirán el futuro del deporte a nivel global.

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