La información contable y financiera pertenece únicamente a la empresa y el contador no puede apoderarse de ella, recordó el Consejo Técnico de la Contaduría Pública.

No devolver los documentos que integran la contabilidad y abstenerse de dar aclaraciones sobre estos datos va en contra de las disposiciones legales y el código de ética establecido en la Ley 43 de 1990.

En este evento, la compañía afectada puede presentar la queja formal, debidamente documentada, ante la Junta Central de Contadores, organismo encargado de ejercer inspección y vigilancia para garantizar que la profesión contable se ejerza de acuerdo con la normativa pertinente, sancionando en términos legales a quienes violen tales disposiciones.

La entidad basó su concepto en el artículo 45 de la Ley 43 de 1990, según el cual el contador público no expondrá al usuario de sus servicios a riesgos injustificados.