Para calificar a un precio como inequitativo o excesivo, es necesario entender las particularidades del mercado y determinar si la conducta es una práctica, procedimiento o sistema que tiende a fijar precios artificialmente elevados. Así mismo, es importante tener en cuenta la presencia de barreras a la entrada en el sector del mercado que se analiza, para justificar la investigación. La Superintendencia de Industria y Comercio es la entidad competente para analizar si los precios son inequitativos en un sector económico, a través de actuaciones administrativas y siguiendo el procedimiento legalmente previsto (decretos 4886 del 2011 y 2153 de 1992, artículo 52, modificado por el Decreto 019 del 2012).