Con la esperanza de que se reactive la construcción en Bogotá recibió el ministro de Vivienda, Luis Felipe Henao, la decisión del Consejo de Estado de suspender provisionalmente el decreto que modificó el plan de ordenamiento territorial de Bogotá (POT). “El plan adoptado por el Distrito Capital era ilegal, no solo en su forma sino también en su fondo. En su forma porque fue adoptado sin respetar las facultades del Concejo Distrital y saltándose de manera arbitraria el artículo 313 de la Constitución Política”, manifestó el funcionario. Además, explicó que de fondo creaba impuestos que no le estaban permitidos a un decreto y deterioraba de forma importante el diseño de ciudad. Ahora, a juicio del Gobierno, esto hace que Bogotá se vuelva a encarrilar hacia una seguridad jurídica que se había perdido, y que había hecho que creciera negativamente la construcción.