Mediante la Resolución 3597, el Ministerio del Trabajo actualizó las actividades consideradas como peores formas de trabajo infantil y estableció la clasificación de actividades peligrosas y condiciones de trabajo nocivas para la salud e integridad física o psicológica de los menores de 18 años de edad. Es así que, para poder trabajar, los adolescentes entre los 15 y 17 años requieren la respectiva autorización expedida por el inspector de trabajo; a falta de este, la autorización tendrá que ser expedida por el comisario de familia o, en su defecto, por el alcalde municipal, a solicitud de los padres, del representante legal o del defensor de familia (Ley 1098 del 2006, artículo 113). Además, la norma señala que, excepcionalmente, los menores de 15 años podrán recibir autorización para desempeñar actividades remuneradas de tipo artístico, cultural, recreativo y deportivo, la cual establecerá el número máximo de horas y prescribirá las condiciones en que esta actividad debe llevarse a cabo. En ningún caso el permiso para la actividad desarrollada excederá las 14 horas semanales. Esta nueva disposición derogó la Resolución 1677 del 2008.