Es viable jurídicamente importar un nuevo vehículo con exención de gravámenes arancelarios para suplir las incapacidades de quien las adquirió en función del servicio en la Policía Nacional y reúne los requisitos previstos en el Decreto 1091 de 1995, una vez el vehículo anterior haya cumplido el tiempo de vida útil y esté deteriorado, pues la norma no dispone algo diferente, indicó la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales. No obstante, cuando el vehículo importado así deje de cumplir el objeto para el cual se realizó la operación bajo la modalidad de franquicia debe aplicarse lo previsto en el artículo 137 del Decreto 2685 de 1999.