De acuerdo con lo previsto en el artículo 11 de la Ley 1480 del 2011 (Estatuto del Consumidor), en los casos de prestación de servicios cuando haya incumplimiento se procederá, a elección del consumidor, a la prestación del servicio en las condiciones en que fue contratado o a la devolución del precio pagado. En el caso bajo análisis, la demandada no hizo efectivo el seguro contra robo adquirido por la demandante, a pesar de tener conocimiento de las circunstancias. Si bien manifestó que con el ánimo de poner fin a la controversia procedería a rembolsar una suma que cobijaba el valor amparado con la póliza contratada y el cobro del deducible correspondiente, la misma no atendía el valor pretendido. La Superintendencia de Industria y Comercio precisó que la devolución del valor debe ser total, sin que haya lugar a descuentos de ningún tipo, por tratarse de la efectividad de la garantía de un servicio que nunca fue prestado.