La Corte Constitucional publicó el texto del fallo que declaró inexequible una expresión contenida en el artículo 49 de la Ley 1395 del 2010 (Ley de Descongestión Judicial), con la que se establecía la declaración de desierto del recurso y la imposición de una multa cuando se presentaba la demanda de casación laboral sin los requisitos exigidos. El alto tribunal señaló que no puede tratarse de igual forma al demandante en casación que no presenta el recurso en tiempo frente a aquel que lo hace pero sin cumplir las exigencias legales, toda vez que de la primera hipótesis se desprende una negligencia, mientras que en la segunda se trata de una carga procesal sobre la sustentación correcta de un recurso extraordinario y de difícil acceso, cuyas consecuencias no pueden ser sino las desfavorables para la parte. Según la corte, la exigencia para la administración de justicia de conocer demandas insuficientemente formuladas es un desgaste inútil, pero soportable, y la declaratoria de inexequibilidad no implica que no pueda hacerse uso de los poderes disciplinarios cuando se presenten recursos evidentemente improcedentes o dilatorios (M.P. Juan Carlos Henao Pérez).