Por medio del Decreto 446 del pasado 12 de octubre, la Alcaldía Mayor de Bogotá asignó a la Secretaría Distrital de Ambiente la función de conocimiento, control, seguimiento y sanción ambiental por las quejas, solicitudes, reclamos y peticiones de los habitantes de la ciudad sobre afectaciones al medio ambiente por contaminación auditiva y sonora, generada por los establecimientos de comercio abiertos al público, sin perjuicio de las demás facultades atribuidas a otras autoridades. La disposición derogó el artículo 47 del Decreto 854 del 2001, que delegaba la función en los alcaldes locales.