Hallazgos fiscales por más de $ 692 millones determinó la Contraloría en actuación especial a la Unidad de Víctimas

La Contraloría General de la República evidenció giros de recursos a fallecidos y graves discrepancias en los datos de los beneficiarios registrados en la Unidad de Atención y Reparación a las Víctimas (UARIV) respecto a información suministrada por la Registraduría. 

La UARIV no pudo soportar actuaciones administrativas que involucran recursos públicos. Se estableció que realizó giros de recursos a beneficiarios y, posteriormente, expidió los actos administrativos conducentes a su reconocimiento. 

Esta situación ocasionó una grave afectación al adecuado manejo y control de la gestión administrativa que realiza la entidad encargada de la atención y reparación a las víctimas, dice el ente de control fiscal.

Estos hallazgos darán inicio a procesos de responsabilidad fiscal, derivados de una gestión inadecuada por esta $ 692,7 millones.

La Contraloría advierte también un inadecuado control sobre pagos realizados por operadores bancarios a beneficiarios fallecidos con posterioridad a los traslados de recursos desde la UARIV, con el agravante de que los bancos no reconocen pagos sobre giros realizados por la UARIV en los casos señalados.  

Y se encuentran graves falencias en los procesos de verificación de identidad de los beneficiarios. Esta última situación causa discrepancias entre los nombres y números de cédula.

Se establecieron nueve hallazgos administrativos, de los cuales cinco tienen posible connotación fiscal, hay ocho con presunta incidencia disciplinaria, siete son de carácter penal, dos para solicitud de indagación preliminar por una cuantía estimada de $ 33.314.000 y uno para proceso administrativo sancionatorio fiscal.